Salen del violín,
convirtiéndose en magia,
sonido y alma.
Gente que cruza
la calle apresurada,
¿a dónde van?
Sol repentino
entre manto de nubes,
guiños traviesos.
Charla y café,
conversación amena.
Brotan las risas.
Una puntada
cosida en el estómago.
Eso es tu ausencia.
Acariciándola,
con suave ronroneo
come la gata.
Azul del cielo
resquebrajado y roto,
en la ventana.
Suben los globos
de todos los colores,
lentas miradas.
Cantan los pájaros
en el amanecer,
pequeños soles.
Rozando el mar,
superficie de arrugas,
pasa un velero.
convirtiéndose en magia,
sonido y alma.
Gente que cruza
la calle apresurada,
¿a dónde van?
Sol repentino
entre manto de nubes,
guiños traviesos.
Charla y café,
conversación amena.
Brotan las risas.
Una puntada
cosida en el estómago.
Eso es tu ausencia.
Acariciándola,
con suave ronroneo
come la gata.
Azul del cielo
resquebrajado y roto,
en la ventana.
Suben los globos
de todos los colores,
lentas miradas.
Cantan los pájaros
en el amanecer,
pequeños soles.
Rozando el mar,
superficie de arrugas,
pasa un velero.
Rozando el cielo, pasan los pájaros y yo me detengo en tus poemas.
ResponderEliminarBesos
Piedra
Tercera entrega de haikus.... y yo sigo incapaz de entenderlos. Como siempre, como toda la vida.
ResponderEliminarNadie es perfecto.
excelentes micropoemas!!
ResponderEliminar(para mí son Senryus más que Haikus por su carácter más social-humano que con relación a las estaciones del año, cosa que es el centro de los haikus)
Felicitaciones Mafalda, no es fácil condensar y darle hilo conductor al micro, por el contrario
abrazo grande y feliz feliz semana
Gracias, lichazul. Sí, ya sé que hago una adaptación propia del Haiku, pero me gusta llamarlos así.
EliminarFeliz semana también para ti, abrazos.